Balacera de más de una hora entre sicarios y policías a las puertas de la Casa Guerrero

Redacción/El sur
Chilpancingo, Gro.- Una persecución y enfrentamiento a balazos entre policías y presuntos sicarios en las inmediaciones de la residencia oficial Casa Guerrero provocó pánico entre presidentes municipales que estaban ayer en ese inmueble con el gobernador Ángel Aguirre Rivero en un evento privado, lo que generó una fuerte movilización policiaca y militar.
Los hechos iniciaron ayer poco después de las tres de la tarde, en la glorieta de Pleasant Hill, frente a la clínica del ISSSTE, en la zona de Jacarandas al sur de esta ciudad.
En ese lugar un grupo de la policía que realizaba un patrullaje por la reunión en Casa Guerrero ubicó a un comando de hombres fuertemente armados que viajaban a bordo de dos camionetas marca Honda, quienes al percatarse de la presencia de los agentes huyeron.
Los policías los siguieron por la avenida principal de la colonia Burócratas, que cruza el Conjunto Turístico Jacarandas, y una de las camionetas se perdió en una intersección, mientras que la otra se dio a la fuga rumbo a Casa Guerrero, y detrás de ella siguieron los policías.
De esa persecución se percataron automovilistas que circulaban por la zona, que se hicieron a un lado, temerosos de que los hombres armados que amagaban desde las ventanillas con disparar los cuernos de chivo, los fueran a herir.
Justo cuando pasaron los presuntos sicarios armados frente a la puerta 3 de Casa Guerrero, la residencia oficial en la que vive el gobernador Angel Aguirre Rivero, iban saliendo varios presidentes municipales de una reunión privada, y al bajar por esa avenida escucharon los primeros disparos de la confrontación armada que se prolongó por más de una hora.
Los disparos provocaron alarma entre quienes salían de Casa Guerrero e inclusive hay constancia pública de que al presidente municipal de Coyuca de Benítez, Merced Baldovinos Diego, una persona de su equipo de seguridad que ya había sacado un rifle AR-15, lo metió aprisa a la residencia oficial.
Testigos de la balacera informaron que policías estatales que custodian la residencia permitieron la entrada de quienes pretendían ponerse a salvo de las ráfagas de fuego y se generó una fuerte movilización en el interior del inmueble.
Ya dentro de Casa Guerrero, un grupo de seguridad del gobernador, que lo acompaña a sus actividades públicas, desplegó una fuerte movilización con armas largas.
Empezaron a pedir identificaciones y a los que no tenían que ver con la reunión privada con el gobernador les pidieron que abandonaran el lugar.
En tanto, afuera de Casa Guerrero, en el Fraccionamiento Tribuna Nacional que se encuentra en la zona, se escuchaban las ráfagas de balazos y en pocos minutos llegaron cuando menos cuatro camionetas fuertemente artilladas del Ejército, de la 35 Zona Militar, que montaron un cerco de seguridad en el área y restringieron el acceso por más de cinco horas a transeúntes y automovilistas.
Se dio a conocer que los supuestos sicarios se habían atrincherado en varios domicilios, donde habría continuado el enfrentamiento.
Ninguna autoridad federal, estatal o municipal informó oficialmente hasta la noche de ayer el resultado de esa confrontación, cómo sucedieron los hechos y si hubo heridos, muertos o detenidos.
Aguirre Rivero sostuvo este jueves en la Casa Guerrero un acto privado con presidentes municipales a los que entregó de forma simbólica recursos del programa federal Hábitat, en un acto donde también estuvo presente el delegado federal de Sedesol, Marcos Efrén Parra Gómez.
Lo anterior fue confirmado por la Dirección de Comunicación Social mediante un extenso boletín de prensa.
Se pudo confirmar oficialmente que Aguirre Rivero se encontraba en la residencia al momento de la balacera, además de que testigos del acto afirmaron que él lo encabezó.
Este viernes a primera hora, el gobernador partirá a la región de La Montaña y estará en la cabecera municipal de Tlapa, donde dará una audiencia pública.

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