“No Llores por mi Argentina”

Fueron Eliminados por Uruguay en cuartos de la Copa America

Martín Cáceres tomó la esférica, respiró prufundo y mandó un zapatazo cerca del palo izquierdo, imposible para el arquero Sergio Romero. El jugador charrúa corrió para abrazar a sus compañeros, el tanto en serie de tiros penales le dio a Uruguay el pase a las semifinales tras vencer a Argentina 5-4 (6-5 terminaron en el global).

El estadio Brigadier General Estanislao López enmudeció. Caras largas se observaron en la tribuna, algunas lágrimas rodaron en los rostros de los aficionados albicelestes, la ilusión acabó, la Copa América en casa de nada sirvió debido a que el conjunto dirigido por Sergio Batista fracasó.

Lo que era alegría se convirtió en drama, y desde los primeros minutos los seguidores del cuadro argentino sufrieron, debido a que el conjunto de Óscar Tabárez abrió la pizarra apenas a los cinco minutos de acción, gracias al tanto de Diego Pérez, pero fue en el 17', cuando Gonzalo Higuaín igualó los cartones.

La balanza se inclinó a favor de los locales, tras la expulsión de Diego Pérez en el 38', pero no fue aprovechado y al final cayeron.  Javier Mascherano también se fue a las regaderas por doble amonestación al 87'.

Y es que, definitivamente, la diosa fortuna no estuvo a favor de los argentinos y sí ayudó a los uruguayos. Prueba de ello es que ya casi al 90', Carlos Tévez lanzó un zapatazo de tiro libre, desvió la defensa pero Fernando Muslera estiró su pierna y evitó el tanto, hubo un contrarremate y nuevamente el arquero estuvo atento.

El cancerbero de la Lazio se convirtió en héroe, y la etiqueta no le pesó en las tandas de penales. Messi, Forlán, Burdisso y Suárez no tuvieron problemas para concretar, fue cuando le tocó el turno al "Apache", quien tomó vuelo y lanzó un balazo, fuerte, cerca de Muslera quien recostó y desvió. Todo estaba definido.

Scotti, Gargano y Cáceres clavaron las últimas tres estacas al ataúd. Pastore e Higuaín, con muchos problemas porque Muslera estuvo a punto de detener, acercaron a la albiceleste.

Hoy, La Argentina llora, recordando aquella canción compuesta por Andrew LLoyd Webber y Tim Rice que reza "No llores por mí Argentina", que queda como anillo al dedo al equipo Batista.