Una Ballena Jorobada Sale a Morir en playa Troncones
Una ballena jorobada joven murió en playa Foluma de la comunidad turística de Troncones, ante la mirada atónita de habitantes y turistas que intentaron por todos los medios regresarla al mar, el cetáceo presentaba múltiples golpes de los rocas del lugar y se encontraba infestada de parásitos, sus restos fueron sepultados en la playa sin que las autoridades federales acudieran a tener conocimiento del suceso. El comisario municipal de esta localidad, Ausencio Solís Hernández, explicó que el mamífero encalló cerca de las tres y media de la tarde en una área de riscos de este balneario, al tener conocimiento de lo ocurrido habitantes y turistas con cuerdas intentaron por cerca de una hora y media de volver la ballena al mar.
Cerca de medio centenar de personas trataron de regresar el mamífero al mar, sin embargo debido a los daños que presentaba dejo de existir, por lo que decidieron sacar el cetáceo de la playa para sepultarlo en la arena.
En las maniobras para rescatar y mover los restos de este animal marino, se contó con el apoyo del rescatistas Ángel del Mar, quien con el apoyo de una camioneta y un tractor movieron los restos de la ballena al lugar donde sería sepultada para evitar riesgos a la salud, debido a la excelente afluencia turística que se mantienen en este destino de playa.
El rescatistas, José Ángel Lara Magaña, indicó que sin duda alguna el animal pudo haber atravesado una corriente de piojos (parásitos) que pudieron haber agravado cualquier condición desfavorable que presentara el animal al hacer su trayecto en el mar, ya que por el corto tiempo que tardó en morir, indica que se encontraba moribunda al momento de vararse en la playa.
El cetáceo de aproximadamente dos años de edad, una tonelada y medio de peso y seis metros de longitud sería sepultada en la playa para evitar que la descomposición de animal afectara la salud de las personas
Cerca de medio centenar de personas trataron de regresar el mamífero al mar, sin embargo debido a los daños que presentaba dejo de existir, por lo que decidieron sacar el cetáceo de la playa para sepultarlo en la arena.
En las maniobras para rescatar y mover los restos de este animal marino, se contó con el apoyo del rescatistas Ángel del Mar, quien con el apoyo de una camioneta y un tractor movieron los restos de la ballena al lugar donde sería sepultada para evitar riesgos a la salud, debido a la excelente afluencia turística que se mantienen en este destino de playa.
El rescatistas, José Ángel Lara Magaña, indicó que sin duda alguna el animal pudo haber atravesado una corriente de piojos (parásitos) que pudieron haber agravado cualquier condición desfavorable que presentara el animal al hacer su trayecto en el mar, ya que por el corto tiempo que tardó en morir, indica que se encontraba moribunda al momento de vararse en la playa.
El cetáceo de aproximadamente dos años de edad, una tonelada y medio de peso y seis metros de longitud sería sepultada en la playa para evitar que la descomposición de animal afectara la salud de las personas
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